Por: Maximiliano Catalisano

En la era digital actual, es común que los niños tengan su primer contacto con la tecnología a edades tempranas, incluso alrededor de los 3 años.

Este acercamiento temprano plantea la necesidad de que los padres y cuidadores acompañen y guíen adecuadamente a los más pequeños en el uso de dispositivos digitales.

Importancia del acompañamiento parental

El acompañamiento de los padres en el uso de la tecnología es esencial para garantizar una experiencia segura y educativa para los niños. Compartir momentos de uso de dispositivos evita que los niños asocien las pantallas con espacios sin compañía adulta, promoviendo un uso más consciente y supervisado.

Consejos para Padres en la Era Digital

Establecer Límites Claros: Definir horarios y tiempos específicos para el uso de dispositivos ayuda a prevenir el uso excesivo y promueve un equilibrio con otras actividades fundamentales para el desarrollo infantil.

Participar Activamente: Involucrarse en las actividades digitales de los niños, explorando juntos aplicaciones y juegos, fortalece el vínculo familiar y permite a los padres orientarse sobre contenidos apropiados.

Fomentar la Comunicación Abierta: Mantener un diálogo constante sobre las experiencias en línea facilita que los niños compartan inquietudes y aprendan a navegar de manera segura en el mundo digital.

Dar ejemplo: Los niños aprenden observando a sus padres. Demostrar hábitos digitales saludables establece un modelo positivo a seguir.

Consideraciones sobre la Edad Adecuada para Introducir la Tecnología

Diversos estudios sugieren que la edad promedio del primer contacto con la tecnología es alrededor de los 3 años.

Sin embargo, es fundamental evaluar la madurez y necesidades individuales de cada niño, evitando la exposición temprana y prolongada a las pantallas, especialmente en menores de 6 años.

QAcompañar a los niños en su primer contacto con la tecnología es una responsabilidad compartida que requiere atención y compromiso por parte de los padres y cuidadores. Establecer límites, participar activamente y mantener una comunicación abierta son pilares fundamentales para fomentar un uso saludable y seguro de la tecnología en el hogar.