Por: Maximiliano Catalisano

Cada vez más familias buscan que sus hijos aprendan programación desde pequeños, pero elegir una academia online que sea accesible, confiable y amigable para chicos no siempre es sencillo. La oferta creció tanto que muchas veces termina generando más dudas que certezas. ¿Qué plataforma conviene? ¿Cuáles son realmente buenas para primaria y cuáles funcionan mejor para secundaria? ¿Qué contenidos necesitan los niños hoy? En esta nota vas a encontrar una guía clara que te ayudará a elegir con seguridad y sin gastar de más, con ejemplos de academias que ya están marcando una diferencia real en la formación digital de los más jóvenes.

El interés por la programación infantil no nació solo por el avance tecnológico, sino porque cada vez más docentes y familias descubren que aprender a programar ayuda a desarrollar pensamiento lógico, creatividad, autonomía y una forma diferente de resolver problemas. Lejos de ser una actividad rígida, la programación para niños se presenta de manera visual, lúdica y narrativa, muchas veces usando personajes, bloques de colores, misiones y juegos que vuelven el aprendizaje natural y entretenido. Esto explica por qué las academias online especializadas en formación temprana están creciendo tanto.

Antes de elegir una plataforma, conviene conocer qué tipo de cursos ofrece, qué metodología usan, cómo acompañan a los estudiantes y qué tan accesible es el contenido para edades diversas. No todas las academias sirven para todos los niños: algunas están diseñadas para chicos que recién empiezan y otras apuntan a quienes buscan un nivel más avanzado. Esta guía recorre las características más importantes a considerar y presenta un ranking con academias que combinan calidad, acompañamiento y precios razonables.

Qué evaluar antes de elegir una academia de programación para niños

Uno de los aspectos principales es la metodología. Las plataformas que trabajan con bloques visuales suelen ser más adecuadas para niños pequeños, ya que permiten comprender conceptos sin necesidad de dominar la lectura o la escritura. Para edades mayores, suelen funcionar mejor los lenguajes reales introducidos de forma gradual, como Python básico, HTML o pequeños entornos de desarrollo diseñados específicamente para jóvenes.

El acompañamiento también es un factor relevante. Algunas academias ofrecen clases en vivo con docentes especializados, mientras que otras proponen cursos grabados que los chicos pueden seguir a su ritmo. La elección dependerá de la personalidad del niño y del tiempo disponible en casa. Las clases en vivo pueden generar más motivación, pero los cursos grabados permiten mayor flexibilidad.

Otro punto importante es la variedad de contenidos. Una buena academia debería combinar juegos, proyectos creativos, desafíos guiados y espacios para experimentar libremente. Los cursos demasiado teóricos no suelen atraer a los chicos por mucho tiempo. Además, conviene observar si la plataforma incluye certificaciones, proyectos finales o actividades que permitan mostrar lo aprendido.

Por último, la accesibilidad económica es un factor decisivo para muchas familias. Hoy existen academias muy prestigiosas que ofrecen planes mensuales razonables, programas gratuitos o períodos de prueba que conviene aprovechar antes de tomar una decisión definitiva.

Ranking de las mejores academias online para aprender programación en la infancia

El siguiente listado reúne plataformas conocidas por su trayectoria, su propuesta pedagógica y sus opciones de precio accesible para familias de distintos países. La selección combina academias centradas en juegos, otras que priorizan proyectos reales y algunas que conectan con lenguajes usados en el trabajo digital actual.

Una de las más recomendadas es Code.org, una plataforma completamente gratuita que funciona como puerta de entrada ideal para niños que nunca tuvieron contacto con la programación. Sus actividades son visuales, simples y muy entretenidas gracias a la presencia de personajes conocidos. Para quienes buscan comenzar sin invertir dinero, es una opción excelente.

Otra academia destacada es Tynker, diseñada especialmente para niños de primaria y primer ciclo de secundaria. Ofrece cursos organizados por niveles, desafíos creativos, actividades temáticas y contenidos vinculados a videojuegos, lo que suele generar gran entusiasmo. Tiene planes pagos, pero también permite acceder a recursos gratuitos que son más que suficientes para empezar.

Scratch, desarrollado por el MIT, es uno de los entornos preferidos por docentes y niños en todo el mundo. Aunque no es una “academia” formal, su plataforma incluye tutoriales, guías y proyectos que permiten aprender de forma práctica. Es gratuito, fácil de usar y muy intuitivo para chicos de 8 a 14 años. Muchas academias usan Scratch como base de sus primeros cursos.

Para familias que prefieren clases guiadas con docentes reales, una opción interesante es Coderhouse Kids, que combina proyectos prácticos con encuentros semanales en vivo. Sus cursos están pensados para edades diversas y su propuesta resulta atractiva para chicos que necesitan un acompañamiento más directo.

Otra alternativa con muy buena relación costo-calidad es KodeKid, una academia online que ofrece cursos de videojuegos, animación, robótica y programación básica. Está organizada por etapas que avanzan a buen ritmo y brinda materiales muy visuales que ayudan a los chicos a comprender incluso los conceptos más abstractos.

También vale mencionar Crehana Kids, que se enfoca en la creatividad digital. No es una plataforma exclusiva de programación, pero ofrece cursos de diseño, animación y creación de contenido que complementan muy bien el aprendizaje tecnológico inicial.

Para quienes buscan algo más avanzado, Code Avengers Junior incluye rutas de aprendizaje que introducen HTML, CSS y lógica de programación real. Es ideal para niños que ya agotaron el nivel básico y quieren un desafío mayor, siempre en un entorno guiado y accesible.

Cómo elegir la mejor opción para tu hijo

La elección final dependerá de la edad, la motivación y el estilo de aprendizaje del niño. Para edades tempranas, lo más recomendable es empezar con entornos visuales. Para quienes ya muestran interés por profundizar, conviene elegir academias que permitan proyectos más complejos. También es importante respetar los tiempos: algunos chicos avanzan rápido, mientras que otros necesitan cursos más guiados.

Lo esencial es que la experiencia sea divertida, clara y adaptada a su nivel de madurez. Aprender programación no solo abre puertas para el futuro, sino que fortalece habilidades que serán útiles en cualquier área: atención, organización, creatividad, resolución de problemas y confianza en sí mismos. Las academias online ofrecen una oportunidad accesible para comenzar este camino sin necesidad de grandes inversiones, siempre que se elija la plataforma adecuada.