Por: Maximiliano Catalisano
El cuaderno de comunicaciones escolar es mucho más que una libreta donde se anotan tareas o se pegan comunicados. Es un puente de contacto constante entre la escuela y las familias, que ayuda a mantener informados a padres y tutores sobre actividades, novedades, reuniones, avances y aspectos importantes de la vida escolar de cada estudiante. Usarlo de manera clara, organizada y constante puede mejorar el vínculo entre la escuela y las familias, evitar confusiones y sostener la participación de los adultos en la trayectoria educativa de los niños y adolescentes.
El cuaderno de comunicaciones suele entregarse al inicio del ciclo escolar, con el nombre del estudiante, grado y datos de la familia, convirtiéndose en un recurso que acompaña a cada alumno a diario. Se utiliza para enviar circulares, recordatorios de actividades, citaciones a reuniones, avisos de salidas educativas y notas de interés general. Para el docente y la secretaría, es una herramienta que permite asegurarse de que la información llegue a cada familia de forma escrita, evitando depender únicamente de mensajes verbales que muchas veces no se comunican en casa.
Además de ser un canal de información de la escuela hacia las familias, el cuaderno de comunicaciones también permite que las familias se comuniquen con la escuela. Los padres pueden utilizarlo para justificar inasistencias, pedir entrevistas con los docentes o el equipo directivo, informar sobre situaciones que puedan afectar el aprendizaje o la asistencia, o solicitar información sobre las actividades escolares. Este ida y vuelta fortalece la relación de la escuela con las familias y genera un registro que puede consultarse en caso de ser necesario.
Para que el cuaderno de comunicaciones cumpla su función, es importante que cada docente se tome un momento al inicio o al final de la jornada para verificar que los estudiantes hayan recibido las notas y circulares, y que estas estén correctamente firmadas por las familias. Del mismo modo, se debe revisar diariamente si hay mensajes enviados por las familias para darles respuesta en tiempo y forma, ya sea por escrito en el mismo cuaderno o llamando a la familia según corresponda.
El lenguaje utilizado en las notas del cuaderno de comunicaciones debe ser claro, respetuoso y comprensible para todas las familias. Se recomienda evitar términos técnicos o frases que puedan generar confusiones. Cuando se trata de informaciones importantes, como citaciones a reuniones, autorizaciones para salidas o informaciones sobre la salud del estudiante, es recomendable pedir la firma de un adulto responsable para asegurarse de que la información haya sido leída.
Algunas escuelas eligen agregar una sección de “avisos” en el cuaderno de comunicaciones semanal, donde se resumen actividades próximas, fechas de evaluaciones y recordatorios importantes, lo que ayuda a las familias a organizarse y acompañar mejor a los estudiantes.
En el caso de la secretaría escolar, el cuaderno de comunicaciones es útil para enviar información sobre trámites administrativos, actualizaciones de datos o requerimientos de documentación. Permite registrar el pedido de certificados, la entrega de boletines y otras informaciones institucionales de manera escrita y con constancia de recepción.
Es importante que el cuaderno de comunicaciones se mantenga en buen estado durante todo el ciclo escolar. Para ello, se puede utilizar una cubierta protectora y explicar a los estudiantes la importancia de cuidarlo y traerlo todos los días a la escuela. De esta manera, se convierte en un recurso diario de trabajo que acompaña la organización de la familia y de la escuela.
En contextos donde se utilizan plataformas digitales, muchas instituciones mantienen el cuaderno de comunicaciones físico como complemento, especialmente en niveles primarios, porque facilita el contacto directo con las familias que no cuentan con conectividad diaria o no utilizan medios digitales con frecuencia. Esto asegura que todos los estudiantes tengan la misma posibilidad de recibir la información.
Cuando se utiliza de forma organizada, el cuaderno de comunicaciones escolar contribuye a evitar confusiones, permite registrar intercambios importantes y favorece la participación de las familias en la vida escolar de los estudiantes. Además, permite fortalecer la confianza entre la familia y la institución, generando un canal de diálogo que aporta al clima escolar.
Usar el cuaderno de comunicaciones de forma práctica requiere constancia, claridad y respeto por las familias. Así se convierte en un recurso simple pero potente para sostener el vínculo entre la escuela y el hogar, acompañando de forma cotidiana la trayectoria educativa de cada estudiante.